De higos a brevas

Higos y brevas: diferencias, cultivo, recolección y una receta deliciosa de higos al armagnac

Los higos y las brevas son frutos muy apreciados, especialmente en la gastronomía mediterránea, donde forman parte de recetas tradicionales. Sin embargo, es común que muchas personas confundan ambos frutos. En este artículo, explicaremos qué son, en qué se diferencian, cómo plantarlos, cuándo recolectarlos y, finalmente, compartiremos una exquisita receta de higos al armagnac.

1. ¿Qué son los higos y las brevas?

Ambos frutos provienen de la higuera (Ficus carica), un árbol originario del Mediterráneo, que ha sido cultivado durante miles de años. Aunque proceden del mismo árbol, los higos y las brevas no son exactamente lo mismo.

Brevas:
  • Descripción: Las brevas son el primer fruto del año que produce la higuera. Se desarrollan en ramas viejas, donde quedaron los brotes del año anterior. Su tamaño suele ser más grande que el de los higos.
  • Sabor: Tienen una piel más gruesa, y su sabor es generalmente más suave que el del higo, con menor dulzor.
  • Temporada: Se recolectan a principios de verano, generalmente entre junio y julio, dependiendo del clima.
Higos:
  • Descripción: Los higos son el segundo fruto de la higuera y se desarrollan en las ramas nuevas del mismo año. Son más pequeños que las brevas, pero más dulces y jugosos.
  • Sabor: El higo es mucho más dulce que la breva, con una piel más fina. La pulpa suele ser de color rojo intenso o ámbar, dependiendo de la variedad.
  • Temporada: Se recolectan a finales de verano, entre agosto y septiembre.

2. Diferencias entre higos y brevas

Aunque tanto los higos como las brevas provienen de la misma planta, presentan diferencias significativas:

  • Tamaño: Las brevas suelen ser más grandes que los higos.
  • Sabor: Las brevas son menos dulces y tienen un sabor más suave. Los higos son más dulces, jugosos y con mayor intensidad de sabor.
  • Textura: La piel de las brevas es más gruesa, mientras que la de los higos es más fina y delicada.
  • Temporada: Las brevas se producen en junio y julio, mientras que los higos se cosechan en agosto y septiembre.

3. ¿Cómo plantar una higuera?

Plantar una higuera es relativamente sencillo y no requiere muchos cuidados. Sin embargo, es importante seguir algunos pasos básicos para asegurar que el árbol crezca sano y productivo.

Clima y ubicación:
  • Las higueras crecen mejor en climas cálidos y secos. Prefieren suelos bien drenados y toleran la sequía, aunque agradecen riegos regulares en climas más secos.
  • Elige un lugar soleado en el jardín, ya que las higueras necesitan al menos 6 horas de luz solar directa al día.
Plantación:
  1. Preparar el suelo: Asegúrate de que el suelo sea rico en nutrientes y esté bien drenado. Si es necesario, puedes enriquecerlo con compost o materia orgánica.
  2. Espaciado: Si vas a plantar más de una higuera, asegúrate de dejar al menos 3-4 metros de espacio entre ellas, ya que las higueras pueden crecer bastante.
  3. Riego: Una vez plantada, riega la higuera con frecuencia durante el primer año para ayudarla a establecerse.
Cuidado de la higuera:
  • Poda: La higuera no requiere una poda estricta, pero es recomendable podarla ligeramente en invierno para eliminar ramas dañadas o mal ubicadas y favorecer la producción de frutos.
  • Fertilización: No necesitan mucho fertilizante, pero un aporte de compost en primavera puede ayudar a mejorar la producción.

4. Cuándo recolectar higos y brevas

El momento adecuado para la recolección es crucial, ya que tanto los higos como las brevas no maduran una vez recolectados. Aquí te indicamos cómo saber cuándo están listos:

  • Brevas: Las brevas estarán listas para la cosecha cuando su piel cambie de color y comiencen a ablandarse al tacto. Suelen desprenderse fácilmente de la rama.
  • Higos: Los higos están listos para ser recolectados cuando la piel empieza a agrietarse ligeramente y el fruto parece "caer" hacia abajo. Deben ser suaves al tacto y tener un olor dulce. Es importante recogerlos rápidamente, ya que su período de maduración es corto.

5. Mejores variedades de higos

Existen muchas variedades de higos en todo el mundo, pero algunas de las más apreciadas incluyen:

  • Higo blanco: De piel verde claro o amarillenta y pulpa rojiza. Es muy dulce y jugoso, ideal para consumir fresco.
  • Higo negro o "Mission": Tiene una piel morada oscura casi negra, y su pulpa es de un rojo intenso. Es una de las variedades más populares, especialmente en la producción de higos secos.
  • Higo Kadota: Este higo es de piel verde brillante y pulpa ámbar. Es más firme y menos jugoso, lo que lo hace ideal para enlatados y mermeladas.
  • Higo Brown Turkey: Una variedad resistente y de sabor suave. Su piel es marrón y la pulpa es de color ámbar rosado. Ideal tanto para comer fresco como para secar.

6. Receta: Higos al Armagnac

Ahora que ya conocemos todo sobre los higos y las brevas, es hora de aprovechar al máximo su sabor con una receta clásica y sofisticada: higos al armagnac. Este licor francés le da un toque especial a los higos, creando un postre elegante y delicioso.

Ingredientes:
  • 12 higos frescos (puedes usar higos negros o blancos)
  • 200 g de azúcar
  • 250 ml de agua
  • 1 vaina de vainilla
  • 150 ml de Armagnac (o brandy, si no tienes Armagnac)
  • Canela en rama (opcional)
  • 1 cucharadita de ralladura de limón
Preparación:

  1. Preparar los higos: Lava los higos cuidadosamente y sécalos. Si lo prefieres, puedes hacer una pequeña incisión en la base de cada higo para que absorban mejor el almíbar.

  2. Hacer el almíbar: En una cacerola, mezcla el azúcar, el agua, la vaina de vainilla (abierta y con las semillas raspadas), y la canela (si decides usarla). Lleva a ebullición a fuego medio, removiendo hasta que el azúcar se disuelva completamente.

  3. Cocinar los higos: Añade los higos al almíbar y cocina a fuego lento durante unos 10-15 minutos, o hasta que los higos estén tiernos pero no deshechos.

  4. Agregar el Armagnac: Retira la cacerola del fuego y añade el Armagnac al almíbar con cuidado. Cocina por un par de minutos más para que el alcohol se integre con los jugos del almíbar.

  5. Reposo: Deja que los higos se enfríen en el almíbar antes de pasarlos a un frasco hermético. Es recomendable dejarlos macerar durante al menos 24 horas antes de servir para que absorban bien los sabores.

  6. Servir: Sirve los higos al Armagnac como postre, acompañados de una bola de helado de vainilla o un poco de nata montada.